Tenemos que pensar que, aunque parece que evolucionan a buen ritmo, las baterías actuales pueden llegar a tener una autonomía de 300 a 400 kilómetros (hablamos de coches “asequibles”) lo que puede ser un problema a la hora de afrontar un viaje largo ya que podríamos necesitar hacer una recarga durante el trayecto.
Esta suele ser una de las preguntas más lógicas que el propietario o futuro propietario de un coche eléctrico se hace antes de tomar una decisión de compra tan importante.
Electromaps, es un portal web colaborativo donde los propios usuarios pueden añadir información sobre los puntos de recarga para los coches eléctricos, enviar fotos e incluso informar de posibles averías o incidencias relacionados con el punto de recarga.
Este portal indica que en España hay 2.900 puntos de recarga en total, entre ellos los hay privados, públicos o propios de los establecimientos.
Los tipos de puntos de recarga pueden variar en función del lugar, del propietario del mismo o de la potencia a la que carguen.
Los puntos de recarga vinculados son aquellos de los que disponen los propios dueños de coches eléctricos.
Normalmente están ubicados en el inmueble del propietario ya sea en su garaje propio o comunitario. Hay que recordar que la actual legislación permite la instalación de un punto de recarga únicamente con solicitar por escrito al administrador la instalación del mismo.
Son aquellos puntos de recarga que están ubicados fuera del inmueble particular del propietario y que denominan de oportunidad. Estos puntos de recarga están ubicados en centros comerciales, hoteles o incluso restaurantes donde los usuarios pueden aprovechar para recargar sus vehículos mientras realizan sus actividades.
En breve veremos cómo aumentan los puntos de recarga de oportunidad debido a que según dice el Real Decreto 1053/2014 las empresas o parkings públicos de nueva construcción están obligados desde 2014 a disponer de un punto de recarga por cada 40 aparcamientos.
Hacen referencia a los puntos de recarga que podemos encontrar en la vía pública. En la mayoría de los casos instalados por ayuntamientos o instituciones públicas.
Actualmente están centrados en las grandes ciudades, por lo que si estás pensando en adquirir un coche eléctrico para uso en una gran ciudad tendrás solventado el problema de repostaje y autonomía pero si quieres un coche eléctrico para viajar asegúrate de que durante el trayecto y en el destino final dispones de puntos de recarga.